El otro día ví una película que se llama “Adulterio”, bueno, en realidad se llama “We don’t live here anymore” (Ya no vivimos aquí), pero como los traductores cinematográficos en Chile son tan chantas, le pusieron así, justificándose en el hecho de que la película trata principalmente el tema del adulterio, enlazado, eso sí, con el amor, la amistad, la culpa y la “moral del adulterio”.
Bueno, es la historia de dos matrimonios, Edith (Naomi Watts) y Hank (Peter Krause), y Terry (Laura Dern) y Jack (Mark Ruffalo), que son muy amigos y aparentan ser las parejas perfectas... Hasta que Edith y Jack comienzan a tener un romance...
... Como típica película de infidelidad, incluye un par de escenas eróticas que pueden espantar a más de algún cristiano y uno que otro evento sexualmente denigrante que, por muy escalofriante y chocante que parezca, es más típicas que un estornudo... Ya saben, relaciones sexuales en un matrimonio que es una imagen social y que se mantiene de pie porque hay niños, en los cuales cada cual piensa en lo que quiere (o en quien quiere), mientras el otro trata de satisfacer la desdicha y el fracaso mediante la realización de un acto que le provoque placer, así es como Hank y Terry utilizan a sus respectivas parejas de una manera fría, burda, cruel, rutinaria y obligatoria.
Así es como Jack se da cuenta de que ama a Edith y Terry decide que tiene ganas de tener sexo con Hank, a pesar de que ama a su esposo (cabe destacar que este es el único personaje que ama a quien le corresponde), y éste quiere que se encame con Hank para que sea feliz, además sabe que Edith no ama a su esposo... Pero cuando esto pasa, muestra celos, lo que lo hace entrar en una confusión gigante, porque sabe que es su ego, y no su amor, el que está herido...
En fin, la cosa es que Terry sufre mucho cuando se entera de la verdad, porque Edith era su amiga y todo el show, pero Hank le agradece a su amigo por estar haciendo feliz a su esposa, porque según él “una casa con una mujer feliz, permite que uno trabaje mejor...”, el tipo era escritor y decidió dedicarle su libro al amante de su mujer.
Lo más turbador de la historia es que al final, perdónenme si se los cuento, pero si no lo hago, no entenderían mi posición, Jack se queda con su esposa, a pesar de que ama a Edith, y él mismo reconoce que NO lo hace por sus hijos...
... Lo que pasa es que cuando Terry supo de la infidelidad de su esposo, se sumergió en un estado de pasividad, dependencia, descuido y alcoholismo, lo que irritaba a Jack, y lo incitaba más todavía a estar con Edith... Entonces, Terry lo echó de la casa, luego de que él le dijera que era imposible que arreglaran el matrimonio porque no la quería y amaba a su amiga... Tras esta dramática discusión, Jack se va a ver a Hank y Edith, quienes estaban sentados como dos buenos amigos, sin mirarse a los ojos, tomando cada uno la situación como si fuesen dos desconocidos que comparten un techo y una hija pecosa y uno que otro polvo rutinario... Hank se va y los deja solos para que continúen con s romance, que es bastante funcionalista, ya que todos funcionan bien con esa dinámica y la única que sufre es Terry...
... Pero Jack y Edith no pueden seguir juntos, nunca comprendí muy bien qué les sucedió, quizás fue que la magia de su amor estaba dada por la idea de tener que esconderse, huir, sufrir en silencio por su amor prohibido, ir a lugares distintos, no sumergirse en la rutina que cada uno tenía con su pareja... En todo caso fue Jack el que más se rehusó a seguir con Edith, se marchó y le dijo que la amaba... Mientras tanto, Terry limpiaba la casa como no lo hacía en años, dejó todo impecable, porque creyó que Jack se marchaba por su falta de preocupación, porque no estaba haciendo las cosas necesarias para que él la quisiera... Como si tuviese que amarla por lo que hacía, y no, a diferencia de cómo ella lo amaba, por lo que era... Triste?... Falta todavía...
... Jack, al ver la casa radiante, se quedó con Terry, asegurándole que no era por los niños, que podían arreglar el matrimonio... Edith se marchó con su hija a casa de su madre y Hank se quedó solo...
... La cruenta conclusión obtenida de estos 98 minutos de cinta, es, como la misma Terry lo dijo enfurecida, que “LOS HOMBRES AMAN A LAS MUJERES POR LO QUE HACEN Y LAS MUJERES AMAN A LOS HOMBRES POR LO QUE SON”... Qué si yo creo que es cierto?... Ejemplos personales me han demostrado que sí, y basta verlo en todas y cada una de las familias que hay en el país... La mujer hace las cosas de la casa, cuida a los niños, atiende al marido cuando llega del trabajo y tener relaciones sexuales con él, muchas veces sin ganas, soportar que él no la entienda, verse bien, salir con sus amigas y, en varias ocasiones trabajar... El hombre en cambio, poco hace para que su mujer esté contenta y no se vaya de su lado, bueno, porque lamentablemente aún hay mucho machismo y la mayoría de las mujeres son dependientes, más sentimentales y piensan más en sus hijos que en ellas a la hora de abandonar a alguien...
... Si la mujer no hace todo lo que “le corresponde”, el hombre la deja, la critica, la trata mal... Si el hombre no hace lo que “le corresponde”, ella lo sigue queriendo... Qué romántico!?... No sé si sea la palabra que mejor calce para la situación, a mí me parece injusto, machista, troglodita, egoísta y decepcionante.
Si tienen tiempo... Vean "D.E.B.S.", es buenísima, no se dejen llevar por las minifaldas de las chicas que salen en la portada... Tiene un contenido muy profundo...
Ahhh! y escuchen "A case of you" de Joni Mitchell, es una canción excelente...